Hay que tener en cuenta si el pezón plano o invertido viene de nacimiento o no. Cuando se trata de una deformación congénita suele ser debido a un acortamiento de los ductos y bandas fibróticas de la mama. Los conductos galactóferos, que son los que llevan la leche al pezón, son demasiado cortos. Si las fibras musculares también están acortadas hacen que el pezón no pueda proyectarse hacia afuera. En el caso de que no venga de nacimiento puede aparecer tras enfermedades como la mastitis o el cáncer de mama o después de una cirugía, por ejemplo.
Si el pezón aplanado o invertido apareciese repentinamente debes acudir al médico lo antes posible. Cualquier alteración en el pecho o en el pezón que ocurra de un día para otro debe ser tomada en cuenta, ya que podría haber alguna enfermedad subyacente. Sobre todo si res una mujer mayor de 50 años, ya que podría tratarse de cáncer de mama.
Cuando el bebé está tomando pecho realmente no se engancha al pezón en sí, sino a toda la areola, por eso un pezón plano no debería ser un problema. Aún así, en algunas ocasiones sí que supone un inconveniente.
En algunos casos durante el embarazo este tipo de pezones salen hacia afuera y el problema se arregla durante la etapa de gestación. Si no es así, incluso el propio bebé con la succión podría acabar sacándolo, aunque podría crear grietas que duelen.
Si te preguntas «¿cómo amamantar a mi bebé si tengo pezón plano?», te interesará saber que para solucionar este problema durante el embarazo hay varias vías que puedes tener en cuenta como:
- Formadores de pezones: son como discos pequeños de silicona que se colocan en el sujetador y ejercen cierta presión que ayuda a ir formando el pezón. Pueden usarse durante el embarazo o la lactancia.
- Pezoneras de silicona: hacen que el pezón se forme y en las primeras semanas pueden ayudar a que el bebé se coloque bien sobre el pecho y se enganche. Conoce aquí Cuáles son las mejores posiciones para amamantar a un bebé y así lo facilitarás aún más.
- Sacaleches: este aparato seguro que ya lo conocías. Lo que quizás no sabías es que si lo utilizas unos minutos antes de dar de mamar a tu bebé puede ayudar a sacar el pezón. Una vez esté fuera, pon al niño en el pecho y el solo buscará la posición y será más fácil. Descubre en este otro artículo Cuándo empezar a usar el sacaleches.
El problema del pezón plano es más bien una cuestión estética, sobre todo cuando es algo congénito. Si es algo repentino, te repetimos que debes acudir al médico con urgencia. Ya hemos visto cómo solucionar el problema de dar el pecho a un bebé. Pero, ¿qué pasa si se quiere solucionar el problema estético, tanto en mujeres como en hombres? Hay varias maneras de corregir un pezón plano.
Las dos formas más comunes de corregir el pezón plano son las siguientes:
Los ejercicios de Hoffman
Son ejercicios para el pezón plano, es decir, están especialmente destinados a extraer el pezón hacia afuera. Tienes que coger el pezón entre tus dedos suavemente y estirarlo hacia fuera con pequeños movimientos rotatorios y mantenerlo así unos segundos. Puedes repetir estos ejercicios dos veces al día para empezar e ir incrementando la frecuencia poco a poco.
No obstante, antes de realizarlos consulta a tu médico, ya que estimular demasiado los pezones podría aumentar la producción de oxitocina de tu cuerpo y estando embarazada podría ser peligroso, ya que podría acarrear un parto prematuro. Además, hay que tener cuidado de no hacerlo con demasiada frecuencia o fuerza, ya que podría provocar una mastitis (inflamación de la glándula mamaria).
Escudos formadores
Son unos pequeños anillos que se adaptan a la areola y así el pezón puede salir por el circulo central del anillo. El anillo tiene una cúpula que lo sujeta y todo esto se coloca en el interior del sujetador bien ajustado. En la cubierta hay orificios para que entre el aire y la piel se oxigene evitando la maceración de la misma.
Sin embargo, la solución definitiva es la cirugía. Se trata de una intervención sencilla bajo anestesia local que puede hacerse en un solo pezón o en los dos. Esta intervención requiere que, dependiendo de la edad, se preserve el conducto galactóforo (para poder dar el pecho en el futuro). Aunque, también es cierto que dependiendo de la gravedad de la intervención del pezón, esta cirugía podría afectar a los conductos galactóforos e imposibilitar dar el pecho.
Normalmente, la cirugía soluciona el problema, aunque podría haber recurrencia y volver a padecerse después de haberse tratado.