Muchas personas esperan la llegada del verano para disfrutar del sol y de las vacaciones. Sobre todo este año, tras varios meses de confinamiento, el deseo de pasar tiempo al aire libre es aún más fuerte. Pasar más tiempo en contacto con la naturaleza, en la playa o en la montaña, puede ser muy beneficioso para la salud física y mental. Sin embargo, como a nadie le gusta sufrir las consecuencias de una insolación u otras molestias típicas de esta estación, lo ideal es tomar ciertas precauciones. Para que disfrutes del buen tiempo con toda seguridad con tus seres queridos, este mes te traemos una guía definitiva de los mejores consejos de salud para el verano. ¡Toma nota y llévalos siempre a mano!
Recomendaciones para un verano saludable
El verano es sinónimo de vacaciones para muchos y con la desconexión se nos olvidan algunos cuidados importantes para prevenir enfermedades cuyo riesgo aumenta con el calor. Recuerda que si eres asegurado de Medifiatc tienes nuestros profesionales médicos a tu disposición las 24 horas, estés donde estés, puedes acceder a cualquiera de nuestros médicos y centros en todo el país y dispones de asistencia médica también en el extranjero. También en verano! A continuación, te proponemos algunos pequeños consejos para cuidar de tu salud que pueden ahorrarte situaciones poco agradables.
Manos
Nuestras manos en muchas ocasiones son el primer punto de contacto que tenemos con el mundo exterior. Con la reciente proliferación del virus Covid-19 hemos visto cómo la correcta higiene de esta parte del cuerpo es clave para prevenir enfermedades infecciosas. Lavarse bien las manos antes de comer y cada vez que volvemos a casa de un paseo es una buena norma y puede prevenir infecciones por virus, bacterias y hongos. Las manos son también una parte del cuerpo constantemente expuesta a los agentes climáticos y si no utilizamos protección notaremos pronto los signos del tiempo. Para prevenir manchas, arrugas y sequedad en las manos se recomienda:
- Utilizar jabones para las manos con un pH neutro.
- Utilizar protector solar (¡sí, también en las manos!) si salimos durante el día.
- Aplicar cremas o aceites hidratantes en las manos antes de acostarnos.
- Realizar una manicura y exfoliación de la piel cada semana para facilitar la regeneración celular y asegurar que las manos estén siempre limpias y sanas.
Pies
Los pies suelen ser los grandes olvidados cuando se habla de cuidados del cuerpo. Nos acordamos de ellos solo cuando sufrimos alguna molestia: ampollas, hongos en los pies, durezas, hinchazón… Con el calor estos problemas son más frecuentes porque los pies están más expuestos, por lo que tomar precauciones en verano es clave. Estas son algunos gestos que te permitirán evitar problemas en los pies este verano:
- Realizar una pedicura cada semana para mantener una buena higiene de pies y uñas.
- La exfoliación y la aplicación de cremas hidratantes te permitirán lucir pies bonitos y prevenir callos y durezas.
- Utiliza siempre chanclas, tanto en la playa como en la piscina. No solo te protegerán contra eventuales cortes, sino que reducen el riesgo de contraer hongos.
Piel
El sol es un elemento importante para la salud y sin él muchas funciones de nuestro cuerpo no serían posibles. Pero no olvidemos que algunos rayos solares son muy nocivos y por esto tenemos que proteger nuestra piel. En otra ocasión ya te hemos hablado de los peligros y consecuencias de las quemaduras solares y cómo actuar. No está de más recordar las reglas para una correcta exposición al sol para evitarlas:
- Evitar la exposición en las horas centrales del día, de las 12:00 hasta las 16:00.
- Protegerse con gorro, gafas y ropa delgada de fibras naturales.
- Beber mucha agua.
- Aplicar protector solar con un factor superior a 30 y resistente. Repetir la aplicación cada dos horas, sin olvidar zonas como orejas, empeines, axilas y manos.
El buen tiempo también es la estación favorita de los insectos y durante nuestros paseos al aire libre tenemos que tener en cuenta posibles picaduras. Aplicar repelentes de insectos es una buena forma de prevenir estas molestias que en los más pequeños pueden tener efectos secundarios graves.
Ojos
El verano puede ser una estación muy dura para nuestros ojos: calor, viento, la sal del mar, el cloro de las piscinas, los días más largos y en ocasiones la reducción de horas de sueño. Aunque no percibamos molestias en el momento, todo esto puede pasarnos factura con el tiempo. Para proteger estos órganos tan importantes y delicados serán necesario algunos cuidados mínimos:
- Utiliza gafas de sol durante el día para protegerte de los rayos dañinos del sol y de la arena u cuerpos extraños en los días ventosos.
- Revisa periódicamente tu maquillaje para asegurarte que esté limpio, evitarás irritaciones.
- Cuando viajes lleva siempre un colirio natural monodosis que te resultará útil para calmar irritaciones o en caso de vista cansada.
- Evita las lentillas en la playa o la piscina, las bacterias presentes en el agua pueden adherir a las lentillas y causar infecciones e irritaciones a los ojos.
- Aunque estés de vacaciones y la tentación de quedarse despiertos hasta tarde para aprovechar al máximo es muy fuerte, el cuerpo necesita descanso. Dormir al menos ocho horas es clave para la salud de tus ojos y de todo el organismo.
Cabello
Si tu cabello recibe los cuidados necesarios durante el verano, sera más sano y fuerte en otoño. No todos recuerdan que hay que proteger la melena de los rayos del sol que causan el envejecimiento precoz. Con un gorro y algunos productos específicos para hidratar pelo y cuero cabelludo será suficiente para prevenir irritaciones y cabello opaco y seco.
Intestino
Los trastornos intestinales en verano aumentan sobre todo a causa del calor, los cambios de rutina y de alimentación. Recordar que nuestro intestino es muy susceptible a los cambios es clave si queremos prevenir desórdenes como el estreñimiento o infecciones por bacterias y virus. Estos son algunos consejos prácticos para mantener nuestro intestino sano en verano:
- Lava siempre las manos con jabón antes de comer.
- Consume abundantes frutas y verduras de temporada, siempre bien lavadas y evita ciertos alimentos que pueden causar estitiquez. En otro post te sugerimos algunas ideas para comer saludable cuando hace calor.
- Toma agua a lo largo del día aunque no sientas sed.
- Sigue las pautas para una correcta conservación de los alimentos, pues el calor aumenta el riesgo de proliferación de bacterias.
- Fijate en las fechas de caducidad.
- Reduce o evita el consumo de alcohol porque puede debilitar tus defensas y además deshidrata.
- Si comes fuera elige con cuidado el bar o restaurante y no confíes en sitios que no presenta condiciones higiénicas adecuadas.
Mente
Hacer vacaciones en verano no dispensa del estrés. Incluso podemos sentir más tensión debido a los cambios, el exceso de actividad o simplemente por el calor. Tomarse un tiempo para meditar, leer un libro o simplemente dormir la siesta también es una forma excelente de cuidar nuestra salud.
Fuente: FIATC