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La esclerodermia es una patología que forma parte del grupo de enfermedades autoinmunes. Su principal característica es la acumulación de tejido similar al de las cicatrices en la piel de cualquier parte del cuerpo, aunque también puede afectar a otras partes del organismo como los vasos sanguíneos o las células que recubren las paredes de las arterias pequeñas.
Esta enfermedad puede afectar a cualquier persona, aunque es más habitual que aparezca cuando se tiene entre 30 y 50 años. Además, se ha constatado que afecta en mayor medida a las mujeres. Una patología que está considerada como rara y de la que en unCOMO te vamos a hablar para que sepas qué es la esclerodermia y sus síntomas.
Causas de la esclerodermia
Las causas que están detrás de esta enfermedad, en realidad, son desconocidas. No obstante, se cree que las principales causas pueden ser las siguientes:
- Genes: diversas investigaciones han conseguido descubrir que tiene relación con unos genes concretos, aunque no se ha podido ir más allá ni determinar si es un factor que realmente es clave en su desarrollo.
- El lupus o la polimiositosis: también se han dado casos en los que esta enfermedad se ha vinculado con otras patologías relacionadas con el sistema inmunitario como el lupus o la polimiositosis porque suele manifestarse al mismo tiempo cuando los síntomas se observan de manera generalizada en la persona. De todos modos, tampoco se ha podido esclarecer del todo este nexo.
- Trastorno autoinmune: lo que sí parece que está más claro es que es un trastorno autoinmune, que origina que sea el propio sistema inmunitario de la persona el que destruya el tejido saludable que hay en el cuerpo, principalmente la piel, como hemos comentado anteriormente.
La esclerodermia cutánea
La esclerodermia se manifiesta en la piel, aunque sus síntomas pueden notarse en otras partes del cuerpo. Esto se explica por la existencia de diferentes tipos de esta enfermedad. En función del que se tenga, se notará en una parte u otra del organismo, aunque siempre todas ellas se perciben en la piel.
De hecho, la piel de las manos y de la cara son las zonas más comunes en las que hace su aparición esta patología. Suelen ser los casos en los que se padece la esclerodermia localizada, que no es habitual que se propague o extienda a otras zonas del cuerpo.
Síntomas de la esclerodermia cutánea
Cuando los síntomas se dejan ver en zonas más amplias de la piel, aparte de hacer su aparición en órganos como los pulmones, riñones o el corazón, estaríamos ante la esclorodermia o esclerosis sistémica. En general, con independencia del tipo de esclerodermia que se tenga, hay unos síntomas que son comunes:
- Color azul o blanco de la piel: principalmente de los dedos de las manos y de los pies. También pueden aparecer zonas más claras y otras más oscuras en la dermis.
- Tensión de la piel: en concreto, de los dedos de las manos, antebrazos y de la cara, que se acompaña de rigidez que no desaparece por más que se apliquen cremas hidratantes o nutritivas que se emplean para los cuidados personales habituales en el día a día.
- Tumoraciones blancas y pequeñas: que se observan por debajo de la piel. En ocasiones, se secreta esta sustancia blanca, que para muchas personas recuerda a la pasta que se emplea para la higiene dental.
- Llagas o úlceras: que sobre todo se localizan en las puntas de los dedos de los pies o de las manos e, incluso, en ambas partes del cuerpo conjuntamente.
Síntomas de la esclerodermia en otras partes del cuerpo
Además de las manifestaciones en la piel, esta enfermedad presenta y se reconoce por otros muchos más síntomas que afectan a la musculatura, tejidos óseos y a los órganos.
- Pérdida de pelo: en general, podemos hablar de que las personas que padecen esta patología también sufren una pérdida de cabello.
- Dolor articular y entumecimiento: también se nota dolor articular y como cierto entumecimiento en algunas partes del cuerpo, como los pies. En las articulaciones se deja sentir a través de inflamaciones y rigidez, que se manifiestan en zonas concretas como las muñecas o los dedos.
- Problemas respiratorios y digestivos: la sintomatología puede incluir a su vez tos seca y dificultad para respirar, aparte de problemas en el aparato digestivo. En este caso, lo más habitual son la dificultad para tragar, malas digestiones por reflujo esofágico o acidez. Son situaciones que se acompañan de episodios de diarrea o de estreñimiento.
Con esta explicación, esperamos desde unCOMO haberte explicado de forma sencilla y clara qué es la esclerodermia y sus síntomas. No te olvides de acudir a un médico ante cualquier indicio de que puedes padecer esta rara enfermedad para que te pueda poner tratamiento y orientarte en los cuidados que necesitas.
Este artículo es meramente informativo, en unCOMO no tenemos facultad para recetar ningún tratamiento médico ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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