Los profesionales consideran que el desgaste dental es un proceso natural, que se va dando con el envejecimiento de las piezas dentales. Esto sucede con el avance del tiempo cuando nuestro cuerpo también envejece.
En algunos casos este tipo de desgaste se genera de manera prematura, esto puede provocarse por distintos factores, entre los más frecuentes una mala higiene dental o malos hábitos que pueden ser perjudiciales como el tabaquismo El estrés es otra de las causas que determinarán el desgaste dental, un problema que podrá altear la calidad de vida de los pacientes.
El desgaste dental requerirá de cierto mantenimiento y distintos tratamientos específicos por parte de los profesionales.
Si te estas preguntando en que consiste, puntualmente, el desgaste dental, te contaremos que es cuando se va perdiendo la superficie del esmalte. Uno de los síntomas más claros es la sensibilidad dental. También se podrá producir cuando hay una fisura en alguno de los dientes. Es muy importante que este problema sea tratado por un profesional de manera inmediata para evitar las molestas consecuencias para los pacientes.
En una edad más avanzada el desgaste dental se podrá dar por: bruxismo, erosión ácida, fricción.
El bruxismo es una de las principales causas del desgaste dental. Se trata de un rechinamiento de los dientes, que por lo general se da en las noches y de manera inconsciente.
La erosión ácida es un tipo de erosión en el esmalte que se debe a la ingesta excesiva de ácidos que generan los alimentos (bebidas azucaradas, zumos, vino).
Al hablar de fricción nos estamos refiriendo a la que genera el cepillo del dientes si es de cerdas muy duras o si es al utilizado. Al cepillarse de manera brusca se generará un sangrado de las encías y un desgaste del esmalte. Se aconseja esperas unos minutos después de cada comida para la realización del cepillado de dientes.
Dependiendo de la causa del desgaste el dentista recomendará cuál es el mejor tratamiento, además de las medidas para prevenirlo, entre ellas moderar o cambiar la alimentación, cepillarse con un cepillo de cerdas más suaves.
Foto | Pixabay
