5 hábitos saludables para incorporar a tu rutina de mañana
Antes de empezar a hablar sobre diferentes rutinas de mañana y los hábitos saludables que podemos incorporar en ella, es necesario aclarar que las personas nos dividimos en dos categorías según nuestro “cronotipo” (característica relacionada con nuestros ritmos circadianos que define tus hábitos de sueño): alondras o búhos.
Y me diréis, qué tiene que ver esto con los hábitos saludables? Pues mucho. Sobretodo teniendo en cuenta que el primer hábito saludable de nuestra lista es el siguiente:
1. Despertarse temprano
Despertarse temprano, o al menos una o dos horas antes de lo que sueles hacerlo, siempre se ha dicho que es un hábito saludable. Además todos hemos oído hablar de que las personas más exitosas del mundo suelen levantarse sobre las 5 de la mañana. Pero claro, qué pasa si según tu cronotipo eres búho?
Entonces no puedes entrar en el club de las personas exitosas y saludables?
La verdad es que muchas cosas no cuadraban. Hace poco, por suerte, una investigación de la Universidad Rockefeller (Nueva York) desvela nueva información en relación al cronotipo de las personas.
Para empezar, nos dice que la clave está en la mutación de un gen que altera nuestro reloj interno. Por tanto, define que el cronotipo viene dado por una predisposición genética. Todos nacemos con una tendencia alondra y en la adolescencia es cuando, los que tienen esta mutación genética, pueden alterar el sueño de manera permanente y convertirse en búhos. Además, también nos comentan que los búhos viven en una sensación de jet lag permanente durante el día y que esto a la larga puede provocar problemas en nuestra salud.
Pero no todo es negativo para las personas búhos, ya que nos introducen un nuevo concepto: La higiene del sueño. Los autores nos aseguran que los “búhos” pueden encarar su predisposición genética y disfrutar de los beneficios del hábito saludable de levantarse temprano. ¿Cómo? Pues como todo. Con disciplina, manteniendo horarios regulares, evitando usar dispositivos electrónicos antes de ir a dormir y intentar exponerse al sol durante el día.
2. Hidratarse
Después de 7 u 8 horas de sueño en las que nuestro cuerpo ha realizado un sinfín de acciones regenerativas y depurativas en nuestro organismo, es importantísimo re-hidratarlo. Además, con el primer vaso de agua de la mañana no solo nos hidratamos, sino que también ayudamos al cuerpo a depurarse del todo. Por eso, cuando mejor sea ese primer vaso más beneficios aportará a nuestro organismo éste habito saludable. Cómo mejoramos un vaso de agua? Apunta:
3. Meditar
Llámale meditar, llámale respiración consciente, llámale relajación, afirmaciones o diario mental. La cuestión es que consigas incorporar el hábito de dedicar un mínimo de 5 minutos, antes de empezar tu día, a conectar contigo. Sólo es cuestión de encontrar éste método que a ti te funcione y que sea de fácil incorporación en tu rutina.
4. Hacer ejercicio
Probablemente sea el paso más difícil de cumplir para mucho de nosotros. Pero está comprobado que empezar el día activando el cuerpo de forma moderada aporta un sinfín de beneficios, no solo en nuestro físico sino también en nuestro estado anímico y en nuestros niveles de energía.
No tiene porque significar ir al gimnasio obligatoriamente, puedes salir a pasear a un buen ritmo, hacer yoga o realizar estiramientos/ejercicios en casa.
La cuestión es que sea algo realista (es decir práctico para que no lo abandones a los dos días) y que te active.
5. Nutrirse
Este paso es el preferido de muchos. Pero no siempre lo realizamos correctamente. Desayunar, es decir, acabar con el ayuno, no tiene por que hacerse igual ni a la misma hora para todo el mundo. Hay personas que no funcionan sin desayunar o otras que a la mañana no les entra nada. Y SI! Todas las opciones ESTÁN BIEN! Lo importante es realizarlo cuando tu cuerpo te lo pida y realizarlo correctamente.
Mientras no coméis ultra-procesados ni azúcar en vuestros desayunos, por desgracia ya estaréis muy por delante de la mayoría de nuestro país en cuando a hábitos saludables.
Pero si queréis aprovechar esta comida para asegurar parte de vuestra ingesta diaria de frutas y verduras crudas, no dudéis en complementarlo con un SMOOTHIE VERDE. Una buena opción sería uno que lleve espinacas, un plátano pequeño, un kiwi y arándanos. También podéis incluir una cucharadita de semillas de chía.
Fuente: Nutribullet