El aceite de palma es un líquido de origen vegetal procedente de la palmera cuyo nombre científico es Elaeis guineensis. Esta planta ha sido cultivada tradicionalmente en algunas zonas de África y ciertos países del sureste de Asia, muy especialmente Malasia e Indonesia, los dos estados que lideran la producción mundial de este aceite.
Pero aunque se produzca en estos países, y a pasar de que en esas zonas sea usado como producto tradicional de cocina, gran parte de la producción se exporta a los países occidentales, donde se procesa para ser usado posteriormente en la industria agroalimentaria y para la creación de combustibles orgánicos.
En nuestros supermercados lo podemos encontrar con muchos nombres distintos, dependiendo de la técnica de procesado que se use, de este modo podemos leer denominaciones tan dispares como aceite de palmiste, grasa vegetal fraccionada, grasa vegetal hidrogenada o estearina de palma.
Toda la controversia generada alrededor del aceite de palma tiene que ver con los perjuicios que su cultivo causa a distintos niveles. A continuación te explicamos cómo afecta el uso intensivo de este producto en distintas esferas de nuestra vida y planeta:
- Peligroso para la salud: a nivel nutricional, y comparado con otros tipos de aceite, el aceite de palma no es una alternativa nada saludable. La razón principal es el elevado nivel de grasas saturadas que tiene. Si lo analizamos, podemos observar que cerca del 50% de las grasas que encontramos en este aceite son saturadas. El consumo reiterado en el tiempo de estas grasas tienen un gran impacto en la subida del colesterol LDL, el malo, lo que incrementa enormemente el riesgo de padecer accidentes cardiovasculares. Otros estudios han demostrado que su consumo aumenta el riesgo de metástasis y que los procesos de hidrogenación a los que es sometido, con temperaturas superiores a los 200ºC, generan sustancias que provocan cáncer.
- Impacto ecológico: Anualmente miles y miles de kilómetros cuadrados de selva tropical son quemados y arrasados para poder abrir paso a la explotación de la palmera del aceite. Los países más afectados son Borneo, Sumatra y Nueva Guinea, aunque es un problema bastante global del sudeste asiático y algunas zonas de África. El drama reside en que muchas de estas selvas tropicales son un auténtico pulmón planetario en el que habitan numerosas especies exóticas en peligro de extinción como el elefante de Sumatra, el orangután o el tigre de Sumatra. La rápida deforestación está acabando con el hábitat de estas especies, deparándoles un futuro desolador.
- Condiciones laborales: El rápido crecimiento que ha sufrido la industria del aceite de palma ha hecho que se necesite numerosa mano de obra procedente de estos países, la mayoría subdesarrollados, con unas condiciones laborales que distan mucho de ser las requeridas por la carta de los derechos humanos. Los regímenes de semiesclavitud y la mano de obra infantil son postales demasiado habituales en las principales plantaciones de palmera aceitera.
Gracias a sus características y composición el aceite de palma cada vez es más usado en distintos productos tanto de alimentación como de consumo en el hogar. A continuación te explicaremos en qué productos pueden encontrar el aceite de palma como uno de los ingrediente principales.
Repostería
En este ámbito sustituyó a las grasas hidrogenadas, que son nefastas a nivel saludable, y es preferido por encima de la mantequilla porqué su precio es mucho menor. El listado de alimentos con aceite de palma dentro de este grupo es enorme, de hecho cuesta encontrar algún producto industrial que no contenga este ingrediente. Está presente en:
- Galletas
- Tartas
- Pasteles
- Bollería en general
Cremas y coberturas
El aceite de palma se derrite a una temperatura superior a la del chocolate, por lo que mantiene una solidez que lo hace mejor a la hora de ser utilizada como crema o cobertura. Por el contrario, también cuesta más de que se funda en la boca.
Productos para untar
Las grasas saturadas presentan mayor solidez, por lo que el alto contenido en este tipo de grasas que contiene el aceite de palma hace que sea perfecto para aportar la textura untuosa que necesitan algunos de los productos siguientes:
- Cacao para untar
- Mermelada
- Margarina
Alimentos precocinados
Uno de los grupos alimentarios en los que el aceite de palma tiene mayor preeminencia es en el de los congelados y los alimentos precocinados. La razón por la que tantos alimentos de este tipo llevan este aceite es que sus características hacen que se conserve mejor que otros aceites como el de girasol, soja y oliva, haciendo que no quede rancio. Además, no hay que olvidar que su precio es más bajo.
- Pizzas
- Patatas fritas
- Frituras congeladas
- Sopas en sobre
- Cremas de verduras envasadas
Aperitivos salados
El hecho de que el aceite de palma soporte mayor cantidad de frituras y a una temperatura más alta que otro tipo de aceites lo convierten en el ingrediente perfecto para los snacks salados o las patatas chips. Además, le aportan la inconfundible textura crujiente.
- Galletas saladas
- Patatas fritas de bolsa
Productos cosméticos
En el caso de los productos cosméticos, saber si llevan este aceite o no se vuelve aún más complicado. El hecho es que no acostumbran a utilizar el aceite de palma bruto, sino que lo procesan para utilizar derivados de este. En muchos casos podemos sospechas que detrás de un elemento determinado se encuentra el aceite de palma, puesto que las grandes empresas cosméticas son uno de los principales compradores de este producto, pero en pocas ocasiones se puede afirmar a ciencia cierta. Este aceite vegetal se utiliza por su textura, que favorece que se pueda untar por la piel, por lo que podemos encontrarlo en productos como:
- Cremas
- Lociones
- Jabones
- Champús