Amor y convivencia: Los pasos




Amor y convivencia: Los pasos

Cada pareja es un mundo, pero todo el mundo pasa por una serie de etapas que tienen que adaptarse. Cada paso es especialmente difícil, pero todo lo que se puede encontrar una gran satisfacción.

  1. Fase de citas

En la fase de las llamadas citas, con el inicio de la construcción de un «nosotros», dominando la fantasía, la motivación y los sentimientos intensos. Miembros de la pareja se conozcan entre sí y crear ciertas expectativas. Este conocimiento viene la preparación de un proyecto de futuro.

Muchas parejas buscan quedarse para siempre en esta primera etapa, pero lo más probable es que probarlo, se produce un rápido estancamiento de la relación.

Tampoco no se recomienda acelerar el ritmo de forma artificial, para llegar a la siguiente etapa sin haber completado el proceso de comprensión mutua.

  1. Fase de Consolidación

Esta etapa se define por el reconocimiento personal y social de la pareja como un proyecto de futuro. Es el momento en que las dos personas, asumiendo explícitamente que quiere compartir un futuro común, «formalizar» la relación a través del matrimonio o unión de hecho. De esta manera, se establece un compromiso que se comparte con amigos y familiares.

Una vez dado este paso, la pareja tiene que adaptarse a la nueva situación, a vivir juntos, construyendo gradualmente su camino juntos. Esto implica la sustitución de los viejos hábitos personales por parte de la familia de nueva creación. En este proceso, es importante el tiempo, ser comprensivo con los demás y respetar los ritmos de cada uno, hasta que alcanza la sincronización.

  1. Fase de los niños

Con la llegada de los hijos o la simple decisión de tenerlos, se entra en una nueva fase de la relación, llena de ilusiones, pero también retos significativos. Es más importante que nunca para apoyar a la pareja sobre la base de la negociación y la buena comunicación como una forma de resolver los problemas.

Debe decidir juntos qué estilo de niño deseo poner en su lugar y ese lugar va a ocupar los niños y la pareja misma, frente al nuevo futuro que se presenta.

A medida que los niños crecen, las necesidades van a cambiar. Los padres se enfrentan a situaciones difíciles, tanto personales como profesionales o familiares. Los niños requieren cada vez más la presencia en la familia y, en especial durante la adolescencia, un lugar de refugio, con una de las principales tareas de los padres es crear un equilibrio satisfactorio para todos.

  1. Fase nido vacío

Cuando llega el momento los hijos abandonan el hogar, se entra en una nueva fase, que requiere una revisión de las funciones y los proyectos de la pareja y cada uno de sus miembros. Para algunas parejas, vuelto completamente a la tarea de ser padres, este momento de reencuentro requiere, de nuevo, una comunicación fluida, en la que se combinan los intereses personales y la revisión en el futuro, y en proyectos de líneas. También puede crear una especie de desorientación conocida como síndrome del nido vacío.

  1. Fase de reforma

La edad superior es una etapa cada vez más larga debido a la mayor longevidad de la población. Se está produciendo este tipo de eventos importantes como la reforma. Cuando se trata de este tiempo, la persona debe reorganizar su tiempo y analizar esta nueva situación con su pareja. La pérdida de la función trabajador requiere un ajuste, que puede ser más o menos duro. En cualquier caso, la situación puede nombrar basarse, de nuevo, la negociación y la comunicación.

Otras pérdidas que se producen están relacionadas con la salud y el proceso de envejecimiento, aunque su efecto puede atenuar, si los niños ofrecen una ayuda activa, iniciando así un proceso de intercambio de papeles entre ellos y sus padres.

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En las primeras etapas, es importante ir construyendo un proyecto común para el futuro, en la que los intereses personales y la pareja se pueden integrar.

La negociación y la comunicación son las mejores armas para superar las dificultades y facilitar el curso sin problemas de la pareja.

Trabajo consistente como padres con los requisitos sociales y maritales es un reto importante que debe ir hacia arriba de manera coordinada, buscando el consenso.

El siguiente paso fuera de la casa ofrece a los niños la oportunidad de recuperar la vida conyugal, aunque en muy diferentes bases.

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